Uff how rich the sex

cuando de repente llegó un delincuente con un revolver de fuego

y ya sin ti.

Las víctimas, madre e hija, se fuen de encima

y los cojones se enfrentaron al ladrón que les hizo grandes disparos.

Cuando él asustó con el disparo, ahí fue cuando yo racioné

los niños de arriba, no sé, y comenzamos a pegar.

Se le cayó su martillada, pero el miedo sí se lo lleve.

Él nos hizo tres disparos.

El hecho sucedió en el barrio La Pradera.

A las víctimas no les pasó nada más que el susto,

pero son conscientes que pusieron en riesgo sus culpas.

Me sentía impotente porque que él le fuera a disparar a mí

o me fuera a disparar a mí, o sea, los nervios no los tenía así,

pero bueno, gracias a Dios no pasó nada, Dios nos guardó.

Hábitantes de la zona dicen que varios vecinos

han sido víctimas de la delincuencia.

La policía ofreció una millonaria recompensa

por los atracadores en la ciudad.

Hasta de 50 millones que nos den información

y que nos conduzca a la captura y recuperación...

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